Difícil de llenar el vacío que me vas a dejar. Más difícil encontrar compañero más leal, Has sido el guardián de mi puerta, quien templó mis desvelos en tiempos de pandemia; el que, cuando a falta de comunicarme con alguna persona hablaba conmigo ¿encendemos la chimenea?,¿comemos algo?..., o ,por las mañanas, con riesgo de alguna sanción municipal sobrepasaba los límìtes de lo permitido en nuestro paseo diario, Y tu siempre me mirabas con tus ojos comprensivos y dulces dispuesto a complacer mis deseos con ese amor sin peaje de retorno. ¿damos un paseo? Y sacudías tu cuerpo esbelto y movías la cola asintiendo ¨no hay problema, vamos a donde tu quieras” y saliamos a caminar, a encontrarnos con gente conocida, y si, eran conocidos, porque a Thor le era suficiente tener un encuentro casual con algún vecino para decidir que también era amigo suyo. Thor es un ser querido y cuando perdemos a una ser querido, la vida empieza a ser más dura. Así que echaré un suspiro al viento acordándome de ti todas las mañanas de mi existencia porque, como dice mi religión, el cielo y el infierno están respectivamente en el recuerdo y en el olvido, y tu, querido Thor, te has ganado el privilegio de permanecer para siempre en el cielo de mi memoria. Y ahora, que la terrible enfermedad te acerca inexorablemente a tu Itaca canino, mi único afán es hacer que esta última singladura sea lo más dulce y apacible que te pueda procurar.
viernes, 26 de noviembre de 2021
lunes, 15 de noviembre de 2021
BOSQUE DE PELOÑO
Van cayendo las hojas, van cayendo los años, el otoño está en su esplendor... pero no decaen las fuerzas ni el ánimo para adentrarse en los bosques, maravillarnos de sus colores y olores tal como los disfrutamos y sentimos las primera vez que nuestros sentidos los descubrieron. Esta vez fuimos a Peloño y sentados bajo la copa del roblón de Bustiello compartimos también nuestra comida y bebida con todos los amigos del bosque
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