Unos van, otros se quedan, algunos regresan para fijar su asentamiento definitivo en este trozo de la geografía de Asturias que combina mar con montaña, ríos con prados y bosques con humedales. Yen este habitat tan diverso cualquier persona en cualquier estación del año sin recurrir a sofisticadas estratagemas, con unos simples prismáticos y una cámara fotográfica casi desde su ventana puede dedicarse a la observación y estudio de las distintas especies de animales y aves que aquí viven. Y ya con algo más de esfuerzo, no demasiado, a la vuelta de la esquina puede acercarse a la naturaleza y realizar descubrimientos aún más enriquecedores. En este vídeo he fotografiado bandadas de pardelas volando cerca de la playa, he sorprendido a la majestuosa garza en plena actividad pescadora, a zarapitpos, colirojas, corzos y despìstados moritos aprovechando las primeras horas de la mañana pues es cuando las aves y otras especies de animales despliegan mayor actividad.
Difícil de llenar el vacío que me vas a dejar. Más difícil encontrar compañero más leal, Has sido el guardián de mi puerta, quien templó mis desvelos en tiempos de pandemia; el que, cuando a falta de comunicarme con alguna persona hablaba conmigo ¿encendemos la chimenea?,¿comemos algo?..., o ,por las mañanas, con riesgo de alguna sanción municipal sobrepasaba los límìtes de lo permitido en nuestro paseo diario, Y tu siempre me mirabas con tus ojos comprensivos y dulces dispuesto a complacer mis deseos con ese amor sin peaje de retorno. ¿damos un paseo? Y sacudías tu cuerpo esbelto y movías la cola asintiendo ¨no hay problema, vamos a donde tu quieras” y saliamos a caminar, a encontrarnos con gente conocida, y si, eran conocidos, porque a Thor le era suficiente tener un encuentro casual con algún vecino para decidir que también era amigo suyo. Thor es un ser querido y cuando perdemos a una ser querido, la vida empieza a ser más dura. Así que echaré un suspiro al viento acordándome de ti todas las mañanas de mi existencia porque, como dice mi religión, el cielo y el infierno están respectivamente en el recuerdo y en el olvido, y tu, querido Thor, te has ganado el privilegio de permanecer para siempre en el cielo de mi memoria. Y ahora, que la terrible enfermedad te acerca inexorablemente a tu Itaca canino, mi único afán es hacer que esta última singladura sea lo más dulce y apacible que te pueda procurar.