domingo, 9 de agosto de 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
EL FASTUOSO RUIDO ENSORDECEDOR DE LA MUERTE
Conocí a Radi en la embajada de Jordania en Madrid. Era un beduino alto y fornido que inspiraba confianza con su rostro siempre sonriente ...
-
Me dirigió una mirada cansada pero de alivio y pudo entender en ella una invitacilon tácita para adentrarme en la solitaria playa de medi...
-
Conocí a Radi en la embajada de Jordania en Madrid. Era un beduino alto y fornido que inspiraba confianza con su rostro siempre sonriente ...
-
Cincuenta, cien, doscientas, setecientas …. ¿hasta que cifra de víctimas podemos llegar para que reaccionemos ante esta barbarie de muert...
No hay comentarios:
Publicar un comentario