lunes, 23 de diciembre de 2013

LA OTRA NAVIDAD

El fin de año huele a compras, enhorabuenas y postales con votos de renovación. Y yo que sé del otro mundo que pide vida en los portales, me doy a hacer una canción. La gente luce estar de acuerdo, maravillosamente todo parece afín al celebrar. Unos festejan sus millones, otros la camisita limpia y hay quien no sabe qué es brindar. Mi canción no es del cielo, las estrellas, la luna, porque a ti te la entrego que no tienes ninguna. Mi canción no es tan sólo de quien pueda escucharla, porque a veces el sordo lleva más para amarla. Tener no es signo de malvado y no tener tampoco es prueba de que acompañe la virtud. Pero el que nace bien parado, en procurarse lo que anhela no tiene que invertir salud. Por eso canto a quien no escucha, a quien no dejan escucharme, a quien ya nunca me escuchó, al que en su cotidiana lucha me da razones para amarle, a aquel que nadie le cantó.

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